La Organización Internacional para las Migraciones (OIM) define la capacidad de movilidad como la movilización de personas de un lugar a otro en ejercicio de su derecho a la libre circulación. Luis Gutiérrez y Pedro Secunza la definen como la capacidad que tienen las personas y las mercancías de moverse dentro y fuera de las ciudades, y consideran tres modos de transporte: vehículo privado, transporte público y transporte mercantil. En ese mismo estudio del Instituto Municipal de Planeación y Competitividad (IMPLAN) de Torreón establecen desde el año 2015 que la problemática principal de la movilidad en la Comarca Lagunera reside en la expansión de la mancha urbana, lo que ha presionado a la estructura vial a tal grado que se ha privilegiado el uso del automóvil particular. Este escenario resulta insostenible e inequitativo para los segmentos de población que no cuentan con un vehículo.
El IMPLAN asegura que en la Región Lagunera las necesidades de traslado de la población de una ciudad a otra son cotidianas, ya sea por cuestiones de vivienda, trabajo, consumo, educación y oferta cultural, entre otras. Y además asevera que la proporción de personas que trabajan y viven en el mismo municipio muestra que los municipios de la Zona Metropolitana de La Laguna (ZML), salvo Torreón, no tienen la capacidad de ofrecer fuentes de trabajo al total de su población, lo cual se compensa con la interacción entre las demás ciudades.
La movilidad segura según la Organización Mundial de Salud (OMS), es aquella que garantiza las interacciones generadas entre el tránsito, transporte y el desplazamiento de las personas en el espacio público que previene los riesgos por siniestros viales a través de la promoción de los modelos de gestión de ciudad, bajo un enfoque de protección al vulnerable que integre los estilos de vida saludables, la generación de espacios de recreación y deporte, el transporte activo y el disfrute del espacio público.
Bajo este término de la movilidad segura, los gobiernos estatales y municipales de la ZML tienen una gran oportunidad para formular políticas públicas e inversiones en infraestructura que mitiguen los riesgos en el tránsito, mejoren la cobertura y calidad del transporte público y propicien el desplazamiento integral de las personas en la ZML.
Una buena forma de comenzar a mejorar la capacidad de movilidad se estableció en el Plan Estratégico con enfoque Metropolitano 2040, donde establecen que la ZML debe contar con un modelo de movilidad equilibrado, equitativo y sustentable. Con un sistema de transporte público intermunicipal incluyente, accesible, económico, cómodo y atractivo para el usuario. Un esquema de movilidad y transporte con una infraestructura vial que facilite la densificación y el crecimiento equilibrado de Torreón y de la ZML. Infraestructura que privilegie al peatón y al ciclista, que incluya a las personas con discapacidad, a grupos vulnerables e incorpore el concepto de calles completas (que incluye al peatón y a todos los medios de transporte público).
La movilidad laboral es un aspecto clave para el proceso de integración del ZML, en la búsqueda de alcanzar la libre circulación de bienes, servicios, capitales y personas, para ello los servicios públicos juegan un rol clave, pues a mejor y mayor infraestructura y servicios públicos de calidad en la ZML, mayor será la atracción de nuevas empresas, el fortalecimiento de las actuales y el crecimiento de la región y el desarrollo de los trabajadores. Para esto, no es necesario descubrir el hilo negro, se puede aprovechar la experiencia de otras regiones en el mundo y en el país, que han identificado ya los factores de éxito y los han implementado satisfactoriamente; bien podemos aprender de ellos y contar con resultados en menor tiempo y con mayor certeza.
*El Dr. Andrés Rosales Valdés es vicepresidente de la Asociación de Recursos Humanos de La Laguna (ARHLA), y colaborador en la Ibero Torreón, organismos integrantes de Metrópoli Laguna.